Así lo ha dictaminado el Juzgado de lo Social 24 de Madrid al declarar la incapacitación permanente de una profesora universitaria que padecía fatiga crónica e hipersensibilidad electromagnética y ambiental. La sentencia es única en este aspecto y crea precedente para futuras patologías relacionadas con la hipersensibilidad a estas ondas. El veredicto se dictó el pasado 23 de mayo y concedió a la docente el 100% de su base reguladora, que ascendía a 1640,80 euros.

El Equipo de Valoración de incapacidades de la Seguridad Social, (E.V.I) , reconoció en su diagnóstico clínico: síndrome de fatiga crónica, enfermedad celíaca, fibromialgia y síndrome de hipersensibilidad electromagnética y ambiental, pese a lo cual desestimó la incapacitación de la paciente.

El Juzgado de lo Social de Madrid pone de nuevo en entredicho el criterio para la concesión de este grado por parte de la dirección provincial del instituto nacional, y reconoce los derechos de la solicitante al afirmar que presenta enormes problemas para el desempeño de sus tareas “con adecuado nivel de profesionalidad y rendimiento».