Cesión Ilegal de trabajadores: Cómo afecta a empresas y empleados en 2024
La cesión ilegal de trabajadores es una práctica cada vez más relevante en el ámbito laboral, especialmente para empresas que recurren a la subcontratación sin conocer los riesgos legales. En este artículo, analizaremos cómo afecta la cesión ilegal de trabajadores tanto a empresas como a empleados, y qué consecuencias puede acarrear en 2024 para quienes participan en este tipo de relaciones laborales.
¿Qué es la cesión ilegal de trabajadores?
La cesión ilegal de trabajadores se produce cuando una empresa cede trabajadores a otra sin cumplir con los requisitos legales para ello. Esta práctica es ilegal en España y puede acarrear importantes consecuencias para ambas partes.
Para que se considere que existe cesión ilegal, deben cumplirse ciertos criterios, como que la empresa que recibe a los trabajadores tenga control directo sobre ellos o que estos realicen su trabajo bajo la dirección y organización de la empresa cesionaria, en lugar de la que los contrató.
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- Ejemplo: Si una empresa de servicios subcontrata personal para otra y estos trabajadores reportan directamente a la empresa cesionaria y no a su empleador formal, podría considerarse cesión ilegal.
Cómo detectar una cesión ilegal
La cesión ilegal de trabajadores puede ser difícil de identificar a primera vista, especialmente en entornos de trabajo donde se recurre a la subcontratación. Sin embargo, existen ciertas señales que pueden indicar que un trabajador está en una situación de cesión ilegal.
A continuación, se detallan algunos indicadores clave para reconocer esta práctica:
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- Lugar de trabajo y recursos de la empresa cesionaria: Si el trabajador realiza sus funciones en las instalaciones de la empresa cesionaria y utiliza los recursos, herramientas y materiales proporcionados exclusivamente por esta, es un indicio de cesión ilegal. Esto incluye el uso de uniformes o distintivos que pertenecen a la empresa receptora y no a la empleadora directa.
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- Control y supervisión directa por parte de la empresa cesionaria: Una de las señales más claras de cesión ilegal es que la empresa cesionaria controle el horario laboral, la supervisión directa de tareas y la gestión de vacaciones del trabajador, aspectos que deberían corresponder a la empresa que formalmente ha contratado al empleado.
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- Dependencia y reportes: Si el trabajador acude a la empresa cesionaria para resolver problemas, recibir instrucciones o reportar su progreso, en lugar de hacerlo con su empleador formal, podría estar en una situación de cesión ilegal.
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- Incorporación en el organigrama de la empresa cesionaria: La inclusión del trabajador en el organigrama de la empresa cesionaria o su presentación ante clientes y terceros como parte de esta organización son fuertes indicios de que el trabajador está desempeñando funciones como un empleado de la cesionaria, lo cual puede ser ilegal.
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- Funciones idénticas a las de los empleados de la empresa cesionaria: Cuando el trabajador realiza las mismas tareas o funciones que los empleados directamente contratados por la empresa cesionaria, sin que exista una diferenciación clara, podría tratarse de cesión ilegal.
Es importante señalar que no todas las relaciones de subcontratación son ilegales. Las empresas pueden externalizar servicios específicos a empresas especializadas que emplean a su propio personal para cumplir con el contrato de manera legal.
La clave está en que los trabajadores de estas empresas subcontratadas sigan dependiendo en todo momento de su empleador formal, sin involucrarse en la estructura organizativa ni en la operativa interna de la empresa receptora.
Sanciones por cesión ilegal de trabajadores
Cuando una empresa incurre en cesión ilegal de trabajadores, puede enfrentarse a sanciones significativas tanto en el ámbito laboral como administrativo. Estas sanciones buscan proteger los derechos de los empleados y asegurar que las relaciones laborales cumplan con la normativa vigente.
A continuación, se presentan las principales consecuencias legales y económicas a las que se expone una empresa en casos de cesión ilegal:
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- Multas económicas: Las empresas involucradas pueden recibir multas que oscilan entre los 6.251 y 187.515 €, de acuerdo con la Ley sobre Infracciones y Sanciones en el Orden Social (LISOS). El monto de la sanción depende de la gravedad de la infracción y de si se considera una falta leve, grave o muy grave. La Inspección de Trabajo y Seguridad Social tiene la potestad de evaluar cada caso y aplicar la sanción correspondiente.
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- Responsabilidad solidaria: En casos de cesión ilegal, tanto la empresa cedente como la cesionaria pueden ser consideradas responsables solidarias de las obligaciones laborales y de seguridad social del trabajador. Esto significa que el trabajador tiene derecho a reclamar sus beneficios laborales, como salarios adeudados y prestaciones, a cualquiera de las dos empresas.
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- Obligación de incorporación: La legislación laboral española permite al trabajador en situación de cesión ilegal elegir entre integrarse en la plantilla de la empresa cesionaria o permanecer en la empresa original. La empresa cesionaria, en este caso, estaría obligada a ofrecer las mismas condiciones laborales y derechos que a sus empleados directos, lo que puede implicar una carga financiera y administrativa adicional.
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- Compensación al trabajador: Además de la posibilidad de integración, el trabajador afectado puede reclamar una indemnización por los perjuicios sufridos. Esta compensación cubre diferencias salariales, beneficios laborales y otros conceptos que se hubieran aplicado de haber estado correctamente contratado en la empresa cesionaria.
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- Impacto en la reputación: Finalmente, una sanción por cesión ilegal no solo afecta económicamente, sino que también daña la reputación de la empresa. Las infracciones laborales pueden influir negativamente en la percepción de los clientes, los empleados y la comunidad empresarial, afectando futuras oportunidades de negocio.
Indemnización por cesión ilegal de trabajadores
En casos de cesión ilegal, el trabajador tiene derecho a optar por:
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- Integrarse en la empresa cesionaria con las mismas condiciones y antigüedad que los empleados directos.
- Recibir una indemnización si decide no incorporarse. Esta indemnización se calcula como en un despido improcedente, siendo:
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- 33 días de salario por año trabajado (con un tope de 24 mensualidades) para contratos posteriores a 2012.
- 45 días de salario por año trabajado (hasta un máximo de 42 mensualidades) para contratos previos a 2012.
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Además, el trabajador puede reclamar las diferencias salariales y beneficios no recibidos desde el inicio de su relación laboral con la empresa cesionaria. Tanto la empresa que cede como la que recibe son responsables solidarias del pago de estos derechos.
Cesión de trabajadores entre empresas del mismo grupo
La cesión de trabajadores entre empresas de un mismo grupo es legal siempre que:
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- Contrato formal: El trabajador tiene contrato con su empresa de origen, que debe formalizar cualquier cesión temporal a otra empresa del grupo.
- Autonomía en la gestión: La empresa de origen sigue controlando aspectos como la jornada y las tareas; la empresa receptora no asume este control.
- Condiciones igualadas: El trabajador debe recibir condiciones salariales y beneficios iguales o superiores a los de su empresa de origen.
- Evitar la cesión ilegal: Si el trabajador depende de la empresa receptora como si fuera su empleador directo, puede reclamarse cesión ilegal.
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Preguntas frecuentes
¿Qué diferencia hay entre cesión de trabajadores y subcontratación?
La subcontratación es legal cuando se cumplen las condiciones establecidas en el contrato y el personal sigue dependiendo directamente de su empleador. La cesión ilegal ocurre cuando la empresa receptora actúa como el verdadero empleador.
¿Es delito la cesión ilegal de trabajadores?
No se considera un delito, pero es una infracción grave en la legislación laboral española, lo que puede derivar en sanciones económicas y responsabilidades solidarias.
¿Qué pasa si soy trabajador de una empresa que practica cesión ilegal?
Tienes derecho a reclamar las mismas condiciones de los empleados directos de la empresa para la que realizas el trabajo. Esto puede incluir salarios, horarios y otros beneficios.
¿Puedo cambiarme a la empresa que recibe mis servicios?
Sí, en caso de cesión ilegal, puedes optar por integrarte como empleado de la empresa cesionaria con todas las condiciones y beneficios que esto implica.